Archivos para 18 agosto 2012

La utopía de mercadillo de Sánchez Gordillo

Juan Manuel Sánchez Gordillo en una imagen reciente. Foto: Reuters

Juan Manuel Sánchez Gordillo en una imagen reciente./ Reuters

Un verano más el alcalde de Marinaleda (Sevilla), Juan Manuel Sánchez Gordillo, vuelve a dar la nota, aprovechando que agosto suele ser un mes de sequía informativa. En esta ocasión ha dado un salto cualitativo como profesional de la parodia y el marketing subversivo de la “no violencia activa”. Así llama el diputado andaluz de IU-CA al supuesto delito de robo con violencia (los jueces lo calificarán) que supuso el asalto de un supermercado de la cadena Mercadona en la localidad sevillana de Écija.

Ataviado con su sempiterno pañuelo palestino al cuello, en versión veraniega, y su megáfono en mano, arengó a los suyos al pillaje pero se guardó muy mucho de cruzar la puerta del establecimiento alimenticio. Las imágenes hablan por sí solas. Por mucho que Sánchez Gordillo lo niegue hubo empujones y empellones a una cajera de Mercadona. También se llevó lo suyo un empleado de la sección de pescadería que con sus botas catiuscas se interpuso en el camino de estos bandoleros del siglo XXI. La fotografía se pudo ver en Twitter, ese gran invento para contar en tiempo real lo que ocurre en cualquier rincón del planeta.

Lo peor de esta utopía de mercadillo en la que vive instalado cómodamente Sánchez Gordillo desde 1979, con sus pulseras, camisas desabotanadas y barba desaliñada, es la imagen de España que ha contribuido a dar al exterior con su última acción. Ha sido tal la difusión y la distorsión de la noticia que no pocos han pensado que en nuestro país el hambre ha provocado el saqueo generalizado de supermercados.

Pronto llegaron hasta Marinaleda reporteros extranjeros de diarios y televisiones, chinos incluso, para entrevistar a este histriónico personaje como si se tratara de un descubrimiento de Washington Irving en sus rutas de viajero romántico por Andalucía. Sólo han faltado los redactores de la revista National Geographic, en plan explorador, para contarle al mundo quién es Sánchez Gordillo. Ya en 2009 el diario The New York Times mandó a una enviada especial a Marinaleda: “El pueblo sin desempleo ni hipotecas”, como destacó en su reportaje el diario norteamericano.

A la prensa internacional-algunos medios definen al dirigente comunista como The Spanish Robin Hood’– no le ha interesado profundizar en la gran farsa sobre la que se sostiene ese laboratorio del comunismo andaluz, que se mira en el espejo cubano y venezolano. Nada hubiera sido posible sin las subvenciones públicas que Marinaleda  ha recibido desde la Junta de Andalucía. Las viviendas por 15 euros al mes, con el suelo y los materiales gratis tampoco existirían.

El maná de dinero público cayó por la campiña sevillana  tras la cesión de una finca del duque del Infantado al pueblo en 1992. Previamente la parcela había sido expropiada. Sobre dicho latifundio de 1.200 hectáreas gira toda la economía local, en torno a una cooperativa agrícola  cuyo modelo sería díficilmente exportable fuera del municipio, que cuenta con menos de 3.000 habitantes. A todo ello se unen también los fondos del PER (Plan de Empleo Rural). Se trata pues de una localidad sumida por antonomasia en la cultura endogámica del subsidio.

Quien no conozca a fondo el mesianismo que caracteriza al  díscolo parlamentario de la federación de izquierdas sólo  tiene que darse una vuelta por Youtube. Allí podrá ver alguna de las pintorescas intervenciones que ha protagonizado en la estatal Venezolana de Televisión (Canal 8), principal órgano de propaganda del Gobierno que preside Hugo Chávez.

«Aquí me siento casi mejor que en casa», le dijo Sánchez Gordillo en una de sus  visitas al plató del 8 a Mario Silva, presentador del programa La Hojilla, que noche tras noche se dedica a fustigar a todo aquel que no comulgue con el credo bolivariano del comandante Chávez.

El diputado andaluz de Izquierda Unida llevó a cabo recientemente una gira de casi tres semanas por el país sudamericano, invitado por una emisora de radio estatal. Cruzó el Atlántico en clase business. Sus defensores le restaron importancia al hecho «al tratarse de un viaje muy largo, transoceánico», adujeron. Lo cierto es que Sánchez Gordillo bien podría haberles dicho a sus anfitriones que le sacaran billete de turista y donaran la diferencia de precio a algún banco de alimentos en Andalucía, o a la propia Cáritas.

Qué decir de los coqueteos del alcalde de Marinaleda con la izquierda abertzale. Nunca ha ocultado su apoyo a Batasuna, la organización política al servicio de la banda terrorista ETA. De hecho, hay constancia gráfica de ello. Raro ha sido no verle a las puertas del hospital Donostia, en San Sebastián, para mostrar su apoyo al etarra Bolinaga, el carcelero de Oterga Lara durante 532 días.

Sánchez Gordillo está ahora en otras batallas, como su última acción de “ocupar” dos entidades bancarias (Unicaja y Santander) además de El Corte Inglés de Jaén, durante su marcha por Andalucía.  Ahora se le ha unido otro oportunista mediático, el actor Willy Toledo, perejil de todas las salsas contra “el neoliberalismo y el capitalismo que nos oprimen”. Ya pueden aprovechar ambos bien el foco, porque con el arranque de la Liga BBVA de fútbol al jornalero profesional de la pancarta se le agota el protagonismo para cederle el paso al balompié capitalista. Sólo falta que los del sindicato SAT ocupen una sucursal de la firma vasca. Mejor no darles ideas.

Resulta triste, por no decir patético, ver cómo la mayoría de dirigentes de IU-CA, empezando por el vicepresidente de la Junta de Andalucía, Diego Valderas, le ríen las gracias al regidor de Marinaleda. Han tratado, sin éxito, de restar importancia a sus últimas actuaciones. Mientras tanto, el PSOE hace oídos sordos a una posible reprobación en el Parlamento andaluz contra el diputado izquierdista. Laisser fe, laisser passé (dejar hacer, dejar pasar).

Menos mal que aún queda algo de sensatez en dicha coalición de izquierdas. El portavoz de IU en el Ayuntamiento de Málaga, Pedro Moreno Brenes, reconocido jurista, ha calificado de “asalto” lo que para otros compañeros suyos fue un acto “simbólico”. Además, dicho edil reclama “gestos” contra Sánchez Gordillo, en clave de alguna sanción disciplinaria interna. Puede esperar sentado y armado de paciencia.

Deja un comentario

Epílogo del caso ‘Malaya’

, , , , ,

Deja un comentario